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Al local comercial “Pool Station”, propiedad de Florencia Villegas, le robaron tres veces de manera consecutiva: el 11, 14 y 16 de agosto. El ladrón quedó grabado en las cámaras de seguridad y el Departamento Investigaciones de Villa Mercedes inició las averiguaciones.

Todos los caminos condujeron a Matías Agustín Ezequiel Rivas, un hombre de 31 años con muchas entradas a la Policía. Gracias a las cámaras de seguridad, los investigadores advirtieron algunos detalles que fueron clave para que se ordenara su detención: el ladrón se cubría el rostro y desviaba los dispositivos de grabación, por ello no solo se pudo establecer su contextura física y vestimentas, sino también un derrame en su ojo derecho. Dejó, además, restos de sangre que pudieron ser de algunos cortes cuando saltó un paredón con alambre.

En cada uno de los hechos, el delincuente ingresó al comercio, que está ubicado en calle Pueyrredón 1672, tras romper una pared de durlock. Se llevó un parlante tipo torre, un celular Samsung J7, bebidas alcohólicas, varias cajas de cigarrillos y una suma aproximada de 200 mil pesos.

Los policías recopilaron las evidencias, donde incluyeron el análisis de redes sociales, antecedentes penales previos y testimonios que ubicaban al sospechoso cerca del lugar. Luego la Fiscalía de Instrucción N° 3, a cargo José Olguín ordenó una serie de allanamientos en los domicilios relacionados a Rivas.

Según consta en la investigación, la pareja del acusado declaró que él había llevado a su casa elementos robados y que el mismo día los vendió. Un amigo del detenido también reconoció que lo había recibido tras los robos, y que presentaba lesiones en manos y pies.

Cuando los efectivos irrumpieron en una de las casas (el pasado 20 de agosto) Rivas intentó escapar por los techos vecinos, pero fue reducido por personal policial. Ahí detectaron que presentaba lesiones compatibles con las que pudo hacerse en el local.

Quedó vinculado por los delitos de “robos reiterados doblemente calificado por escalamiento y efracción” y a disposición de la Justicia. Lo último que se sabe es que el juez Alfredo Cuello resolvió su libertad.

Según figura en su lista de antecedentes, el 24 de julio ya había sido detenido por una causa de robo investigada por la fiscalía 4. Pero como también fue liberado, a los pocos días salió de su casa y volvió a delinquir.